La Cooperativa atendió una emergencia cloacal en una estación elevadora que «no cuenta con final de obra»
Personal de Agua y Cloacas de la Cooperativa Eléctrica de Trelew trabajó arduamente para resolver un problema de desborde de líquidos cloacales que se produjo en el barrio 32 Viviendas AOT, próximo al barrio Güemes, en calle Azurduy de Padilla y Martín Fierro.
Si bien la guardia resolvió el inconveniente rápidamente, la gerencia de Agua y Cloacas aclaró ayer que «dicha situación excede a esta entidad, explicando que la contingencia se debió a la salida de servicio de la Estación Elevadora Cloacal construida por parte de una empresa contratista del Instituto Provincial de la Vivienda (IPV)».
En ese marco, la Cooperativa Eléctrica sostuvo en un comunicado oficial, que esa obra «no fue recepcionada por la entidad, que no cuenta con final de obra y que se encuentra observada en varios de sus elementos vitales de funcionamiento».
«Esta prestataria de servicios públicos -se añade- hace saber que la empresa contratista construyó una losa de tapa de la estación elevadora que hace imposible el retiro de la electrobomba sumergible para su mantenimiento y reemplazo; además, el tablero de comando y fuerza motriz presenta problemas de diseño estructural que genera un riesgo eléctrico muy importante. Estas observaciones y otras de menor importancia fueron informadas al comitente en octubre de 2014, antes de que el barrio fuera entregado a los adjudicatarios. En diciembre de 2016, con la red del barrio en funcionamiento se reiteró el pedido al comitente y se le comunicó el riesgo ambiental que se presentaría en caso de que el equipamiento tuviera algún inconveniente en su funcionamiento».
Se indica asimismo que la Cooperativa «seguirá resolviendo los problemas de los vecinos de este barrio cada vez que sucedan, pero no puede dejar de aclarar a los socios, que hasta el momento no recibió la documentación conforme a obra de las instalaciones. Por tal razón para el mantenimiento y control de la infraestructura debemos trabajar a ciegas y tomando responsabilidades que exceden nuestro alcance. La empresa contratista -se remarcó- debe hacerse cargo de resolver a la brevedad las observaciones realizadas por los equipos de técnicos de la Cooperativa y/o en tal caso el IPV deberá arbitrar todos sus medios disponibles para solucionar los inconvenientes que se presentaron debido a las falencias de la obra».