Desde el 22 de enero la Cooperativa Eléctrica de Trelew y el Organismo Municipal Regulador de los Servicios Públicos (OMRESP) comenzaron a trabajar sobre sanciones a los vecinos que conecten bombas de presión a la red para realizar tomas de aguas en forma directa, tal como advirtió ya la prestataria de servicios públicos.
En ese sentido, debe recordarse que la utilización de este tipo de bombas está prohibida, aunque hasta la fecha no existían penalizaciones para quienes de todas formas las usaran.
En Trelew existen hoy centenares de socios que utilizan este tipo de elementos, tomando el agua directamente de la red, lo que genera problemas de presión para sus propios vecinos, dejándolos sin la provisión adecuada.
Además de esta circunstancia, la Cooperativa Eléctrica aclara que la utilización de estas bombas producen daños en el sistema de cañerías, el que no está diseñado para soportar ese tipo de presión extra y, por lo tanto, se ve colapsado, afectando así el suministro y provocando pérdidas que le generan inconvenientes al resto de los socios.
La entidad ya detectó más de un centenar de hogares con este tipo de artefactos gracias a las mediciones de flujo y presión atípica en la red, sitios que serán los primeros en ser inspeccionados.
Denuncias
Los vecinos que detecten la utilización de este tipo de bombas en su barrio podrán realizar denuncias en forma anónima (si así lo desean) por whatsaap al número +54 9 2804 365962, generando así una inspección conjunta del OMRESP y de personal de la Cooperativa.
En esta tarea habrá una primera instancia de intimación al vecino para que retire el equipo, pero si la conducta ilegal persiste se le restringirá el suministro de agua al mínimo, para higiene y consumo personal hasta, por último, retirarle el servicio de aguas y cloacas.
Solidaridad
La Cooperativa apela a la cooperación de los socios para combatir este tipo de delitos, teniendo en cuenta que el uso desaprensivo de estos equipos demuestran también una gran falta de solidaridad ya que no solo afecta a las instalaciones, dañándolas, sino sobre todo a la calidad de vida de sus propios vecinos que no reciben agua en cantidad y con la presión necesaria, fenómeno que multiplicado por cientos de bombas en la ciudad genera los permanentes reclamos, sobre todo de las zonas más alejadas.